Home / Adult / La psicología humanista

La psicología humanista

with No Comments

 

“Es necesario comprender al humanismo como un nuevo Paradigma, surgido simultáneamente en USA y en Europa, después de Hiroshima, y sus implicaciones para la psicoterapia y la Psicología como una nueva ciencia que pretende integrar una concepción del hombre y del quehacer terapéutico pretendidamente más holístico, más filosófico, además de científico.” (E. R. Aedo)

___________________________________________________________________________________

La psicología humanista: sus orígenes y su significado en el mundo de la psicoterapia a medio siglo de existencia.    (extracto)

(ENSAYO)
Edgardo Riveros Aedo*

Universidad Adolfo Ibáñez

Ajayu Órgano de Difusión Científica del Departamento de Psicología UCBSP

versión On-line ISSN 2077-2161

Ajayu v.12 n.2 La Paz ago. 2014

License: Attribution 4.0 International (CC BY 4.0)

_____________________________________________

RESUMEN

El artículo intenta dar cuenta del surgimiento de la Psicología Humanista en la década de 1960, destacando sus orígenes y características distintivas, los objetivos de su nacimiento y evaluando sus logros, así como nuevos fenómenos psicológicos descubiertos.  Se describe un nuevo paradigma emergente, conocido como Filosofía de lo Implícito creado por Eugene Gendlin, descubridor del Focusing. Finalmente se destacan los aportes de la Psicología Humanista que han perdurado después de medio siglo de existencia.

Conceptos claves: Experienciación, significado sentido, autopropulsión, cuerpo significante.

___________________________________________________________________________

La Psicología Humanista es el fruto de una revolución en el pensamiento filosófico y psicológico a la luz del quiebre occidental de la filosofía clásica y de una ciencia psicológica que, para inicios del siglo XX, resultaba empobrecida por las limitaciones propias de un paradigma racionalista y con predominio del contenido (1)para comprender los fenómenos psicológicos y humanos, conocidos y desconocidos para la época. Una revolución en el pensamiento generada en un siglo donde la civilización occidental queda cuestionada históricamente por las guerras mundiales del siglo XX y una nueva filosofía que aparece con nuevos horizontes conceptuales procedentes de la fenomenología de Edmund Husserl, y por el existencialismo de Sören Kierkegaard y Friedrich Nietzsche.

  1. Contexto mundial en que nace el humanismo psicológico

El mundo quedó sorprendido con el final ideológico del macro conflicto bélico de la Primera Guerra Mundial en 1919 cuando el término de la misma quedó zanjado por un golpe de estado en Alemania de inminente inspiración ideológica. Después de 25 años, la humanidad quedó atónita cuando la avanzada tecnología científica de la física moderna pone fin al conflicto mundial en aquel fatídico 6 de Agosto del año 1945, en que se dejó caer la primera bomba atómica sobre la humanidad en Hiroshima. Desde entonces el mundo habría enfrentado el uso de armas nucleares que hacían inviable los conflictos bélicos, enfrentada a un tipo de guerra nunca antes vista, conocida como guerra fría, un conflicto en que se enfrentan dos modelos ideológicos excluyentes de sociedad por parte de las grandes potencias. El objetivo de la guerra fría no era ganarla, sino que evitar perderla, dado que el modelo más exitoso debía demostrar su superioridad.  Ambos sistemas estaban inspirados en una visión del hombre como un ser que debe conquistar la naturaleza y el universo a través de una civilización extremadamente desarrollada en lo científico pero profundamente inefectiva para resolver los conflictos en forma dialogada.  La humanidad se vio enfrentada entonces a una era de revolución cultural a nivel de un cambio y cuestionamiento de todo lo existente. El mundo llegó a necesitar de una Psicología acorde a un desarrollo histórico que permitiera a la sociedad buscar y dar solución pacífica a los conflictos entre nacionales, que ya no podrían ser resueltos tecnológicamente. Era necesario descubrir una nueva forma de concebir esta ciencia cuyo paradigma imperante hasta 1945 no tenía mucho que ofrecer frente a los grandes problemas que el hombre tiene con el hombre, dicho en palabras de Martin Buber (1878-1965). Espiritualmente, Occidente toma conciencia de su incapacidad filosófica y psicológica para comprender la nueva dimensión de la guerra, la nueva interrogante de cómo resolver conflictos internacionales sin derramamiento de sangre. De este modo, el siglo veinte vive en una guerra altamente tecnificada e ideológica desde 1919 hasta la caída del muro de Berlín en 1989.

Es necesario comprender al humanismo como un nuevo Paradigma, surgido simultáneamente en USA y en Europa, después de Hiroshima, y sus implicaciones para la psicoterapia y la Psicología como una nueva ciencia que pretende integrar una concepción del hombre y del quehacer terapéutico pretendidamente más holístico, más filosófico, además de científico. Ello implicaba ir en busca de otras formas de conocimiento como la Filosofía, Religión, el Arte y la Magia como prácticas milenarias de curación física y mental.

Luego de describir lo qué es la Psicología Humanista, haremos una evaluación del estado del arte de esta nueva Psicología que ha hecho importantes aportes en el fenómeno del diálogo y la liberación individual a través del proceso de cambio y la posible explicación del mismo y de la dimensión social, hasta ahora ignorada por el biologismo y el racionalismo de la época, así como del trastorno psicológico conocido tradicionalmente como neurosis.  A partir de esta nueva actitud crítica, es necesario destacar que mucho de ideología hay, precisamente, en el concepto de neurosis. En ella aparece un nuevo componente, contenido y acepción que llegó a complementar el término como una alienación de acuerdo a Erich Fromm. La neurosis comenzó a verse entonces como un modo subliminal de destruir la autenticidad, de condicionar el potencial humano que no se desarrollaba de acuerdo al individuo sino de acuerdo a la presión homogeneizante de la sociedad. A la luz de los hallazgos de Abraham Maslow que estuvieron directa o indirectamente conectados con el proceso de autoactualización junto a las experiencias cumbre, pudo constatarse el descubrimiento de nuevos y profundos hallazgos en el territorio de ser uno mismo.

La Psicología humanista es una revolución cultural que obedece a una época de postguerra donde resurgió el ímpetu por vivir plenamente la vida ya que, literalmente estábamos amenazados de muerte por la era nuclear. Habíamos llegado a un mundo con una paz en interdicto. Einstein había declarado que una tercera guerra mundial sería nuclear y que en una cuarta guerra mundial se usarían de nuevo sólo el arco y la flecha. Llegamos a un mundo tecnificado, que había enfrentado el holocausto, con una nueva esperanza de vida, con una fe racional en la paz mundial. En la segunda mitad del siglo XX, aconteció el resurgimiento mítico de una nueva humanidad que debía venir, una humanidad que asegurara la paz mundial y el desarrollo humano hacia la plenitud y la igualdad, de vernos como una humanidad que debía alcanzar una dimensión de hermanos como diría el gran juglar de la época, John Lennon, en su magistral obra de Imagine. Había surgido una nueva era, la época del anhelo dialógico entre hermanos. Todos los seres humanos éramos iguales e igualmente libres, sin importar la raza ni el credo religioso ni político. Se había abierto un espacio iluminado en el pensamiento y en la cultura mundial, llegábamos a la década de los sesenta, una década marcada por la agitación político-cultural, una agitación intelectual marcado por la antropología que nos enseñaba de culturas diversas; la palabra cambio se erigió como una gran esperanza para transformar un mundo convulso (las revoluciones se habían diseminado en el extremo oriente, en África, en América Latina, es asesinado el presidente John F. Kennedy en Dallas, Estados Unidos y la Unión Soviética entran en la crisis de los misiles en Cuba, la Guerra de Vietnam se intensifica con la participación de Estados Unidos, Francia se convierte en potencia nuclear y comienzan sus pruebas en el Pacífico Sur, el Che Guevara es ultimado en Bolivia, la música de los Beatles se hace un fenómeno mundial, surge la Revolución de Mayo en Francia, la URSS invade Checoslovaquia, etc.)

  1. Surgimiento de la Psicología Humanista

La Psicología Humanista nace oficialmente en USA en 1962, cuando un grupo de psicólogos y pensadores progresistas de la época declaran su voluntad en desarrollar un enfoque nuevo que trascendiera los determinismos y la fragmentación de los  modelos vigentes del  Psicoanálisis y del Conductismo; el anhelo era entonces   desarrollar un nueva Psicología que se ocupe de la Subjetividad y la  Experiencia Interna, de la Persona como un todo, sin fragmentaciones como la conducta o el inconsciente, o la percepción o del lenguaje, sino que contemplar a la Persona como objeto luminoso de estudio, y asimismo,  desarrollar una nueva disciplina que investigue los fenómenos más positivos y sanos del ser humano como el amor, la creatividad, la comunicación, la libertad, la capacidad de decidir, el cambio terapéutico, y sobre todo, la autenticidad y el arte de ser uno mismo, porque de allí debía provenir el sentido de respeto y responsabilidad; desde ese núcleo del Ser,  puede surgir un camino del existir que sea sano o sabio, equilibrado y pleno, la autenticidad como un proceso de auto-aceptación y aceptación de todo lo que existe.

Este grupo de pensadores estaba constituido por singulares exponentes de una inquietud cultural nueva: Kurt Goldstein, Erich Fromm, Carl Rogers, Abraham Maslow, Fritz Perls, Rollo May,  Karen Horney, Aldous Huxley, Herbert Marcuse, y además  estaban integrando este grupo revolucionario del pensamiento contemporáneo, dos jóvenes psicoterapeutas, ellos eran Sidney Jourard y Eugene Gendlin, ambos de 26 años de edad, convirtiéndose en el primer presidente de la Asociación Humanística y  el futuro descubridor del Focusing, respectivamente.

La Psicología Humanística norteamericana es un   movimiento que acaba de cumplir los 50 años de vida, habiendo revolucionado la escena contemporánea de la Psicología y sus frutos son hoy conocidos en el mundo entero, a partir de la formación de la Psicología Humanista en USA en 1962.

El humanismo psicológico del antiguo continente, en cambio, ha tenido una rama más filosófica que científica y sus expresiones provienen de la fenomenología existencial, de pensadores Heidegger, Sartre y Biswanger. Sobreviene entonces la ignorada dimensión espiritual, es decir, la incorporación de la espiritualidad por parte de la Logoterapia fundada por Viktor Frankl, a la Psicología del Diálogo originada por Martin Buber, y en el nuevo continente, el fenómeno del sentido religioso de Paul Tillich. El humanismo europeo tiene una tradición más filosófica y teológica. De allí también que grandes pensadores de la altura de Friedrich Nietzsche y Sören Kierkegaard nos dejaran un legado a partir de una profunda crítica a las raíces del pensamiento filosófico y teológico occidental, que dio origen a la sospecha que hacía derribar el franco vuelo de las certezas en el pensamiento de lo verdadero y lo falso. Es fundamental incluir en esta revolución a la corriente de pensamiento transpersonal que ha puesto en evidencia las formas de conocimiento que surgen desde el individuo en el conocido fenómeno de ampliación de la conciencia, uniendo la tradición oriental con los hallazgos experimentales, donde se ha manifestado una preocupación por la espiritualidad, la experiencias con la muerte individual y el hallazgo de la mente holotrópica por parte de Stanlislav Grof (1931).

  1. La Psicología Humanista en Chile, América Latina y Occidente

La Psicología Humanista es poco conocida y lo poco que se conoce en Chile no es exacto, siendo, por tanto, conceptualizada de un modo ambiguo lo que ha dado lugar al surgimiento de un sin número de prejuicios. La Psicología Humanista ha tenido un espacio en la malla de la formación de psicólogos en la mayoría de las universidades chilenas y, sin embargo, es muy poco conocida por lo que es, siendo más bien por lo que no es. Con el propósito de esclarecerla, se revisará primero lo que no es.

La Psicología Humanista no es una corriente sistemática y coherente de Escuelas, por así decirlo, sino la expresión de muchos pensadores que queriendo encontrar un camino más cercano al hombre, se han atrevido a desafiar el statu quo de la academia y comenzado a actuar, creando y realizando intervenciones sobre la realidad psicológica que han tenido muchísimos aciertos. Podemos citar el caso de la Terapia Gestáltica de Perls, la Programación neurolingüística o PNL, el Focusing, Terapias sistémicas, Intervenciones de la Logoterapia y la aproximación experiencial enfocada en las emociones de Greenberg.

En segundo lugar, la Psicología Humanística no es una corriente que deseche a la ciencia como método de conocimiento, sino que toma el conocimiento también de otras fuentes distintas a las tradicionales. La así llamada Tercera Fuerza, como la llamó Abraham Maslow, su fundador, ha abierto sus puertas de par en par para conocer al Hombre, desde la Teología y la Religión porque la sabiduría acumulada en esas dimensiones trata con el ser humano y su dimensión espiritual. Esta tercera fuerza busca en la Filosofía las conceptualizaciones necesarias para dar forma lingüística a fenómenos nuevos en la dimensión humana como la autopropulsión de Gendlin, la auto-actualización de Maslow, la individuación de Jung y términos usados por los actuales humanistas que interpretaron directa o indirectamente la denominada caída luminosa de Nietzsche, o la caída auténtica que acontece en el desarrollo existencial del individuo en el recorrido de la existencia individual. Es más, la Psicología Humanista es considerada como anticientífica o acientífica porque se inspira en el Arte universal, consultando a poetas y literatos sobre el fenómeno conocido como el drama humano.

Los aportes de Rollo May (1909-1994) a la interpretación psicológica del arte desde un psicoanálisis existencial son una muestra de las muchas otras incursiones en el alma humana a partir de escritores como Dostoievski, Flaubert, Shakespeare, Joyce o Camus. La Psicología Humanista ha dado origen al acercamiento, emprendido mucho antes por antropólogos, hacia el conocimiento desarrollado en otras civilizaciones y culturas, extintas o vivas. Al alimentarse de otras fuentes del conocimiento como lo son las prácticas del chamanismo y las intervenciones sobre la energía espiritual, al servicio del descubrimiento de sí mismo y del desarrollo de la armonía interna, conocidas hoy como Meditación, forma similares al Mindfullness. La psicología Humanista lo hizo desde una coherencia declarada en su fundación, al abrirse a otras formas de conocimientos además de la ciencia, dejando ésta de ser la única fuente para conocer y descubrir.

La Psicología Humanista ha sido impartida en la malla curricular (Pensum) de la formación del psicólogo en Chile desde 1970 en adelante, y lo que ha sido entregado a los alumnos aspirantes a psicólogos ha sido sólo algo muy general que ha quedado consignado a los movimientos de sus autores más emblemáticos como Abraham Maslow (1908-1970), el Enfoque Centrado en el Cliente de Rogers (1902-1987), la Terapia de la Gestalt de Fritz Perls (1893-1970) y sus derivados como la Programación Neurolingüística (Bandler y Grinder, 1970-1980) y, finalmente, la Psicología Transpersonal, iniciada en América Latina por el chileno Claudio Naranjo, quien junto al boliviano Ishazo, adaptaron el Eneagrama en Occidente.

El surgimiento de la Psicología Humanista como una asociación mundial es un movimiento perteneciente al continente americano debido a la fuerte emigración europea de una generación de intelectuales devastada por la segunda guerra mundial y por la persecución nazi. De modo que las raíces esenciales del movimiento humanista se encuentran en los cuestionamientos filosóficos extremos que habían hecho ciertos pensadores de renombre del viejo continente y que se situaban en una línea disidente del pensamiento académico oficial ya en los albores del siglo XIX (Kierkegaard, Pascal, Dilthey y Nietzsche).

El humanismo europeo nace en el período de preguerra a través de los pensadores fenomenólogos como Husserl, Heidegger, Ortega y Gasset, Merleau-Ponty por un lado, y del existencialismo por otro, representado por pensadores como Sartre, Unamuno, Camus, Marcel, y Saint-Exupéry.

De este existencialismo brotan pensadores que hablan de Psicología desde la filosofía y desde la teología: Martin Buber, Viktor Frankl, y Paul Tillich, declarando que el ser humano es una criatura espiritual y, dando cuenta de ello a través de fenómenos nuevos: otorgar un sentido al sufrimiento por medio de la espiritualidad, por una postura espiritual más que por una actitud mental. El milagro como cambio de rumbo existencial está ampliamente descrito en la obra de Paul Tillich (1886-1965) uno de los teólogos norteamericanos más influyentes del siglo XX. La dimensión espiritual y mística ha sido narrada y descrita en forma amplia por esta corriente. La psicología llegó a recuperar la perdida dimensión espiritual que los griegos entregaron a la religión, dejando a la filosofía sin espíritu y como consecuencia, la psicología había nacido científicamente sin espíritu. Frankl tuvo el mérito de demostrar esta dimensión en los campos de concentración por la que tuvo que pasar la humanidad a consecuencia de esta guerra ideológica altamente tecnificada del siglo XX. La guerra ideológica se apoderó de los hogares de la población civil del mundo y muchos países sufrimos la devastación, persecución, exilio y consiguiente quiebre de la convivencia nacional, surgiendo dos tipos de sociedad a partir de una nación. Las guerras civiles y los golpes de estado se sucedieron a lo largo del siglo (Revolución mejicana 1910, Revolución cultural China  1911, Revolución  Rusia 1917, Guerra civil Española 1936, la  Primera  (1914-1919) y segunda (1939-1945) guerras mundiales, luego los cuatro enfrentamientos de la guerra fría: La guerra de Corea (1951-1953) que terminó en la división del país en una Corea del Norte y otra del Sur, Guerra del Vietnam (1962-1975), la crisis de los misiles en Cuba (1962), la Guerra del Golfo (1991).

El humanismo europeo es decididamente filosófico, cuestionando las raíces mismas del pensamiento filosófico occidental marcado por el empirismo, quiebre iniciado por los filósofos Kierkegaard y Nietzsche (Siglo XIX).

La Psicología Humanista no es un sistema ni un pensamiento, sino más un movimiento constelado, de connotados autores que tienen en común la ampliación de la ciencia, buscando el conocimiento de lo propiamente humano en otras disciplinas (antropología, filosofía, la religión y el estudio de la dimensión artística). Además de nutrirse de otras disciplinas, esta nueva Psicología intenta abarcar al hombre como un ser holístico y complementado a su contexto, legitimando la dimensión subjetiva a través de un nuevo objeto de la Psicología: la experiencia interna.

  1. Las aspiraciones de la Psicología Humanista

El humanismo en psicología aspiró a los siguientes nuevos conceptos que en sus 50 años de existencia, han llegado a conformar un nuevo Paradigma desde distintos ámbitos: lo común en la declaración de 1962 en USA era alcanzar una visión holística del hombre, integrarse a la sociedad con una metodología de investigación más amplia para estudiar a la persona humana, integrar todas las fuentes de conocimientos conocidos hasta la fecha, incluyendo a la teología, la filosofía, el arte y las prácticas del chamanismo. Una psicología que aspiraba a trascender las clínicas psiquiátricas y llegar al hogar de las personas. Se revisará en qué consisten estas tres nuevas dimensiones en este nuevo modo de hacer psicología.

a. Visión holística del hombre

La pretensión era concebir una disciplina que estudiara al hombre como un ser total, es decir, que la dimensión metal estuviese integrada a la conducta, así como a la espiritual. Estudiando a este ser como un todo no fragmentado (percepción, lenguaje, pensamiento etc.) La aspiración era trascender las dicotomías que habían caracterizado a la psicología tradicional (sujeto-objeto, sujeto y contexto, razón y emoción, razón e intuición, razón e inconsciente, mente y cuerpo, cuerpo y espíritu). Dicho en breves palabras, era concebir al ser humano como una sola unidad con su ambiente, tener presente que el ser humano es también una unidad en sí misma, es decir, somos biológicos y espirituales a la vez, somos estéticos y primitivos a la vez, somos proactivos y reactivos a la vez. Recobrar la subjetividad de la persona humana en el estudio de la Psicología era el gran sueño. Al final de esta discusión se revisará cómo se ha logrado esta pretensión durante los 50 años de desarrollo, a la luz de una sociedad globalizada como la actual y que no es ideológicamente sectaria como lo fue durante la guerra fría. Este primer aspecto se refería a qué conocer, y qué descubrir. El objeto de estudio de la Piscología Humanista fue entonces la Persona Holística, libre y total, sin reduccionismos ni fragmentaciones.

b. Una Psicología con rango de disciplina científica y también filosófica, podría constituirse en una ciencia superior del hombre

Este aspecto se refiere principalmente al modo de conocer, debiendo hacer un positivismo metodológico que asegure no dejar nada fuera, trascendiendo la limitación de no poder medir lo inmedible, trascendiendo el límite de investigar según la selección ética del asunto a investigar. En esta aspiración se pretendía investigar lo urgente y dramático, aquello que es urgente para la humanidad y no aquello intrascendente y banal. Según el humanismo psicológico, la pregunta ética debe ser trascendente cuando se habla de investigar en psicología y ello debe estar determinado por una priorización social libremente decidido por un investigador consciente de las necesidades de cada nación. La búsqueda del conocimiento debería ser en el mundo actual una búsqueda que tenga en cuenta el medio ambiente, el cuidado de la especie humana y de las demás especies del planeta. Medios y fines deben afinar un alineamiento que sea ecológico y humanizante.

En esta preocupación por el cómo investigar, debe anteponerse la palabra para qué investigar en un sentido o en otro. La Psicología Humanista ha tenido importantes aciertos a través del concepto de ciencia de Carl Rogers, terapeuta que demostró científicamente que la empatía lograba producir  cambio terapéutico (2). Los trabajos de Leslie Greenberg es otra demostración que es posible investigar lo relevante y lo humano (3).

c. El conocimiento debía inspirarse ahora en variadas fuentes, más allá de la ciencia

La Psicología Humanística americana plantea en el año de su inicio la necesidad imperiosa de abrirse hacia otras disciplinas que también “saben” del hombre, nutrirse de un conocimiento que provenga de otras formas de conocer, a saber: la religión, la filosofía, la magia y el arte. La naturaleza humana se trasluce en las sagradas escrituras, en la filosofía existencial y fenomenológica como es el caso de Kierkegaard (la angustia es un síncope de libertad). La sanación ha sido abordada por el chamanismo desde el inicio de la revolución neolítica (8 mil años atrás) y la naturaleza psicológica del ser humano es vista en el arte de Occidente desde Homero en su Ilíada (750 A.C.). El sueño en 1962 era construir una al alcance de todos, que trascendiera el ámbito psicopatológico, y que “sirviera” para comprender y mejorar la vida cotidiana, con una profunda crítica hacia la cultura occidental, considerándose que las raíces mismas de la sociedad eran fuente de enfermedad, por lo que se conoció en El malestar de la cultura (4),  siendo la civilización occidental  que había culminado por invadir e imponer su sistema de vida en  los tres cuartos del planeta a inicio del siglo XX, habiendo finalmente llegado a la actual globalización favorecida por  los grandes cambios tecnológicos.

  1. Postulados filosóficos del humanismo

El conocimiento nace de la experiencia humana (Dilthey, Husserl) y el ser humano es un ser-en-el-mundo (Heidegger), es decir una existencia que se hace al andar (Machado), al ser una existencia, el ser humano es un proyecto de mundo, una trayectoria responsable de descubrir y desarrollar su propio potencial auténtico y singular (Heidegger, Nietzsche), una caída desde el nacimiento hacia la muerte a través del concepto de caída luminosa (Nietzsche), el ser humano es un ser relacional (Buber). Eugene Gendlin fundador del Focusing ha elaborado un nuevo modelo para concebir al hombre, conocido actualmente como la Filosofía de lo Implícito.

  1. Los nuevos enfoques y los nuevos fenómenos humanos descubiertos por la psicología humanista

Los enfoques múltiples que nacieron del humanismo son los siguientes: El Enfoque Centrado en la Persona (C. Rogers), La Gestalt (F. Perls), La Programación Neuro Lingüística P.N.L. (Grinder y Bandler), El Análisis Transaccional o A.T. (E. Berne), El enfoque experiencial de las Emociones (L. Greenberg), Psicoterapia Experiencial y el Focusing (E. Gendlin), La Psicoterapia Sistémica, Logoterapia (V. Frankl). Todos estos enfoques hablan de un modo particular y altamente efectivo para hacer psicoterapia, sustentando su aproximación particular con una teoría y una práctica acordes. Las que han combinado su teoría con investigación científica son sólo tres: Enfoque Centrado en la Persona (ECP), Psicoterapia Experiencial (Focusing), Enfoque Experiencial de las Emociones. Hemos legado un vasto conocimiento teórico en primera persona por parte de Psicólogos de renombre mundial como Abraham Maslow (teoría de la auto-actualización) y Sidney Jourard (teoría de la autenticidad). Los enfoques que han decidido no ser científicos pero han sido de gran aporte a las prácticas de psicoterapia son La Gestalt, Análisis Transpersonal, la logoterapia, la Psicología Transpersonal, etc. La Psicología humanista podría entenderse también en torno a los fenómenos que fueron descubiertos y desarrollados por los distintos pensadores, se hará un recorrido de las expresiones más significativas del humanismo en un orden de prioridad histórica, comenzando por el padre de la tercera fuerza, que fue como la denominó su propio autor: Abraham Maslow.

El proceso de auto-actualización de Abraham Maslow

Abraham Maslow denominó como La Tercera Fuerza a esta nueva psicología que nacía antes de la década de los sesenta, siendo considerado el padre de la Psicología Humanista ya que fue el primero en teorizar en el ámbito de la academia una nueva teoría del potencial humano. La auto-actualización o auto-realización del potencial humano lo condujeron a realizar estudios en las personas sanas pudiendo concretar su aporte de una Psicología sobre la dimensión sana del ser humano. Maslow sostuvo que Freud había escrito un compendio completo sobre la enfermedad psíquica y que la otra parte que faltaba era construir cómo eran las personas sanas. A partir de los modelos como Albert Einstein, Kurt Goldstein, Ruth Benedit y Max Wertheimer, estos tres últimos fueron maestros y amigos muy estimados y admirados por Maslow. Al tener un cuadro completo del potencial humano, Maslow llegó también a ser uno de los primeros en escribir sobre el ámbito transpersonal en sus escritos sobre la dimensión espiritual y los estados evolucionados del comportamiento ético. Siguió los estudios y escritos antiguos de Lao Tsé, distinguiendo el comportamiento altruista del desarrollo del potencial humano. De este modo llegó a sus denominadas experiencias cumbres o sublimes (Peak experiences).

Maslow es conocido en el campo laboral y educativo por su teoría de la motivación humana y por la teoría de la pirámide de necesidades. La psicología del SER o Toward a Psychology of Being (Maslow, 1968) tomó una primera dimensión para Maslow, trascendiendo el psicoanálisis y el conductismo con su idea de un potencial humano que viene en nuestra genética y otros elementos que se auspician en el aprendizaje de toda la vida, aspiramos a algo superior y ese algo está en nosotros mismos. Cuando Gendlin asistió a una de sus conferencias antes del encuentro del 1962, se quedó para conversar con el expositor después que la mayoría del público se había retirado. Gendlin alabó lo valioso de su enfoque y de sus ideas nuevas. Maslow le respondió que lamentablemente a nadie le importaba mucho sus ideas y que en el futuro sus ideas se olvidarían. Gendlin comenta que afortunadamente Maslow en eso se equivocó: hoy en día las ideas de Maslow son ampliamente conocidas y vigentes. En 1967 la Asociación de Psicología Humanista lo distinguió con el premio del mejor psicólogo del año.

Con su teoría de la auto-actualización, Maslow puso en el centro de la atención psicológica el problema del concepto de salud mental, un modelo de funcionamiento pleno de la personalidad y lo hizo en función de los estudios realizados por él mismo y de un proceso que también había sido desarrollado en forma paralela por Carl Rogers: el funcionamiento óptimo de la personalidad después de la terapia. La auto-actualización es similar también al proceso de individuación que nos propone Carl Jung que, en definitiva, es uno de los grandes ideales humanistas: el proceso de actualizar el potencial humano para ser uno mismo. Este fenómeno también ha sido muy desarrollado por autores como Fritz Perls y Sidney Jourard.

Se prosigue la exposición de acuerdo al orden histórico, cuando se publica en la Universidad de Harvard gracias a Allport la obra de Viktor Frankl, cuando la dimensión espiritual es incluida por aquel psiquiatra vienés que vivió y sobrevivió el campo de concentración debido a un fenómeno espiritual y no mental, conocido como actitud noética.

[ … ]

__________________________________________________________________________

Artículo completo:     La psicología humanista: sus orígenes y su significado en el mundo de la psicoterapia a medio siglo de existencia.     Edgardo Riveros Aedo

____________________________________________________

Notas

Profesor Adjunto en Universidad Adolfo Ibáñez (Chile). Psicólogo Universidad de Chile y Magíster en humanidades. Coordinador Instituto Focusing de Nueva York para Chile (2000). E-mail: Edgardo.riveros@uai.cl

  1. Paradigma racionalista que se fundamenta en Aristóteles y en Sócrates inicialmente, unido al componente del contenido, es decir, deducciones del lenguaje para interpretar el drama humano a través del significado que puede buscarse en los libros, tal como fue la tradición homérica de la que Freud es un representante y gran admirador. Como se revisará, el humanismo experiencial se centra en el proceso y deja de lado el contenido.
  2. Cabe destacar que Carl Rogers fue el primer terapeuta en hacer ciencia manteniendo la Condición de Persona en el paciente y en el terapeuta en 1944, cuando publica en Chicago su libro La psicoterapia Centrada en el Cliente (1957).
  3. Leslie Greenberg ha desarrollado trabajos con el cambio en la profundidad emocional, habiendo recibido el premio Outstanding Early Carreer Award  de la Society for Psychotherapy Research (SPR)  y el  premio de Distinguished Carreer Research(2004)

___________________________________________________________________